Arte Tibetano

La cultura y el arte de Tíbet tienen una larga historia y fuertes características étnicas y regionales. El arte tibetano está íntimamente ligado a la religión. La cultura del budismo tibetano es la base de las artes y cultura tibetanas. Han pasado 5.000 años desde su origen y desarrollo. Si viajas a Tíbet, encontrarás colores budistas y símbolos por todas partes. Las obras de arte tibetanas presentan muchos patrones auspiciosos, como diseños de objetos budistas, con un significado simbólico determinado. Las formas artísticas incluyen murales y frescos tibetanos, Thangka, Escultura de Mantequilla Tibetana, Mandalas de Arena y Grabados en Acantilados y Rocas Tibetanos, entre otros. Estas expresiones artísticas ayudan a los turistas a conocer más sobre el misterioso Tíbet.

Thangka es una forma de arte pictórica única de la cultura tibetana. Su temática abarca historia, política, cultura y varios campos de la vida social. Por lo tanto, el Thangka puede considerarse la enciclopedia de los tibetanos. En cuanto al contenido, se trata principalmente de religión, historia, cultura, arte, ciencia y tecnología tibetanos, que encarnan la fe y sabiduría del pueblo tibetano y registran su civilización, historia y desarrollo. >>Ver más sobre el Thangka Tibetano

Mandalas de Arena son una de las artes religiosas más únicas y exquisitas del budismo tibetano. Siempre que hay un gran evento Dharma, los monjes del monasterio relacionado utilizan millones de granos de arena para representar el fantástico mundo budista, lo que puede llevar unos días incluso varios meses. Desde hace 2.500 años, Buda Sakyamuni comenzó a enseñar a sus discípulos a crear Mandalas de Arena. Y luego este exquisito arte religioso se heredó generación tras generación. En el siglo XI, se extendió a Tíbet desde el norte de la India y se ha conservado hasta ahora. >> Ver más sobre los Mandalas de Arena

Ópera Tibetana, también conocida como Lhamo, es una obra teatral del Tíbet con canto y danza con máscaras. Se formó en el siglo XIV y se difundió por la meseta tibetana. En el siglo XVII, se separó de los rituales religiosos de los monasterios. Los ocho repertorios que se suelen representar se originan principalmente en los mitos y leyendas de las escrituras budistas para persuadir el bien y castigar el mal. Heredando la esencia de la cultura tibetana, la ópera tibetana es una parte integral de la vida local, mostrando su perspectiva y reflejando los pensamientos y sentimientos de la gente.

Arquitectura Tibetana es también una encarnación del arte tibetano. El arte arquitectónico de Tíbet ha alcanzado un nivel muy alto, que busca equilibrar la funcionalidad y el arte, no solo absorbiendo el estilo arquitectónico étnico de los Han y otras minorías étnicas, sino también conservando características y tradiciones propias. El Palacio de Potala es un representante típico de la arquitectura tibetana, con el marcado contraste de colores rojo, blanco y amarillo en sus paredes exteriores, así como el método de construcción por niveles, todo reflejando las características típicas de la arquitectura tibetana. >>Ver más sobre la Arquitectura Tibetana

Escultura de Mantequilla Tibetana se originó en la religión Bön tibetana. Los artesanos ponen una variedad de pigmentos minerales en la mantequilla, la convierten en material base y, finalmente, la amasan manualmente en formas de varias estatuas de Buda, figuras, flores, árboles, pájaros y animales. La Escultura de Mantequilla es una obra maestra de las esculturas. >>Ver más sobre la Escultura de Mantequilla Tibetana

Arte Mural Tibetano es un milagro del arte tibetano, que plasma los cambios en la sociedad de la meseta con métodos de pintura crudos, simples y primitivos y colores espléndidos. Los murales se originaron a partir de las pinturas rupestres tibetanas, que tienen una amplia gama de temas, incluyendo todos los aspectos de la producción y la vida. También hay muchos patrones que representan la naturaleza, animales y plantas, como caza, pastoreo, expediciones, danzas, etc. Con el cambio del tiempo, la forma de pintura rupestre se desarrolló gradualmente. Especialmente después de la transferencia del budismo a Tíbet, las pinturas rupestres comenzaron a transformarse de acantilados y cuevas a murales, y el contenido estuvo estrechamente relacionado con el budismo.

Grabados en Acantilados y Rocas Tibetanos son tesoros del antiguo patrimonio cultural tibetano y una parte importante del arte escultórico chino, con un estilo único y una distribución extensa. Por lo tanto, algunas personas dicen que Tíbet es una galería y biblioteca de arte de tallado en piedra sin paredes. Las piedras Mani esparcidas por todo Tíbet son una manifestación concreta de la evolución de estas costumbres antiguas. >>Ver más sobre los Grabados en Acantilados y Rocas Tibetanos

La Epopeya del Rey Gesar es la epopeya más larga del mundo y un representante de la literatura tibetana. El Rey Gesar es un nombre ampliamente conocido en todo Tíbet, aunque es un héroe ficticio en la leyenda tibetana, no una persona histórica real. Hay muchos milagros alrededor de las famosas montañas y ríos relacionados con él. Sus historias son cantadas oralmente y transmitidas por artistas folclóricos tibetanos. >>Ver más sobre el Rey Gesar

Los lugares recomendados para experimentar el arte y la cultura en Tíbet son el Palacio de Potala y el Museo del Tíbet. La sala del tesoro del Palacio de Potala muestra una gran colección de valiosas obras de arte, como sellos, regalos, textos budistas clásicos, manuscritos en hojas de palma, estatuas de Buda, thangkas y objetos del budismo tibetano. Uno de los tesoros más preciados es la estatua del Hevajra Tantra hecha en el siglo XIV. El Museo del Tíbet es el tesoro de Tíbet y el primer museo moderno, donde no solo puedes apreciar la preciada colección de arte tibetano, sino también aprender sobre varias artes folclóricas tibetanas.